sábado, 3 de agosto de 2019

MIEDOS

Tengo miedo. Miedo a desearte, a querer acariciar tu piel con mis manos y notar tu tensión de incomodidad. A querer besarte por todas partes y decirte cosas hermosas y que construyas un muro de indiferencia a tu alrededor para no dejarme entrar en él. Tengo miedo a querer quitar tu coraza y que tu solo quieras quitarme la ropa.
A desnudarme para ti, no solo de cuerpo sino de alma, y que tú no veas más allá de una piel desnuda y unas piernas en las que meterte. 
Miedo a implicarme en una relación con un folecón que salta de un lado a otro, de una casa a otra, gastando bromas, tomando el pelo a sus habitantes, bebiendo y comiendo lo que encuentra a su paso para seguir su huida continua, para no pararse a pensar... ni a sentir.
Tengo miedo a ser carne, nada más, y no emoción.
Pero a pesar del miedo, soy valiente. O lo intento. Quiero seguir deseándote, seguir creyendo que mereces la pena. Seguir queriendo acariciarte hasta que tu mástil se yerga de deseo, hasta que me desnudes y entres y me veas completa, como soy, con mis miedos. Sin ser fuerte como crees, pero siendo valiente. Arriesgándome a que huyas sin previo aviso y me quede sin saber con quién estuve realmente. Arriesgándome a ser persona que vive, y no muerto viviente.
Y si pierdo la batalla por hacerte huir cuando no eres mi enemigo, al menos me quedará la satisfacción de pensar que lo intenté, que no fui una cobarde. Que me arriesgué a intentarlo a pesar de las señales que me dicen que tengo la batalla perdida.
 Y pensaré que nuestros encuentros fueron escaramuzas de dos náufragos que quisieron nadar desnudos, juntos, durante un rato, hacia una isla desierta en la que ahora me encuentro yo.

martes, 23 de julio de 2019

CERRA...DURA

   Quieres abrir la puerta de mi cuerpo y no puedes, porque no te das cuenta que antes tienes que abrir mi corazón y mi mente. Quieres usar tu llave en la idea de que funcionará pero no es así. No hay un cerrajero mágico que consiga lo que no quiero ni lo que quieres tú. No quiero abrir mi puerta a quien no merece entrar. No quiero una llave que va de cerradura en cerradura intentando ser útil, abriendo todo lo que puede a su paso como si fuera una llave maestra, para no ver sus miedos e inseguridades. 
    Las llaves maestras solo sirven como sustitutas de las verdaderas, cuando se pierde la titular y no queda más remedio que usar la que vale para cualquier cosa en un momento de apuro, nada más. 
   Quiero una llave que venga con un buen llavero, aunque no sea bonito, que tintinee en mi entrada avisándome de que está esperando y que no tiene prisa por penetrar en la cerradura, que esperará el tiempo preciso sin salir huyendo hacia otro lado, que la mano que la sostenta sea  la misma capaz de acariciar en mi puerta y de recibir caricias, sin miedo, sin huir al menor síntoma de emoción. Que tenga la valentía de enfrentarse a qué quizás no sea la llave adecuada y a que puede fracasar en el intento, porque igual que Alí Babá, con las palabras mágicas y la actitud clara y honesta, a veces se abre la cueva sin falta de llave...

domingo, 28 de abril de 2019

OLVIDO

Vapor caliente que asciende como las nubes de verano, mientras una cascada cristalina cae sobre mi cabeza, empapando mi pelo y mi cuerpo desnudo. Torrente que despierta los sentidos, aguzándolos  para que disfruten las caricias que unas manos resbaladizas reparten con esmero por todos los rincones, incluidos los más secretos, aquellos en los que no puede entrar cualquiera.
Burbujas jabonosas impregnan de espuma mi ser, envolviendo mi desnudez con un vestido transparente que huele a frutos del bosque e invita a lamerlo. Dedos que frotan cual esponja, eliminando cualquier huella que no debiera estar ahí, que se quedó olvidada aprovechando un descuido.
Miles de gotas calientes resbalan por mi piel, arrastrando la suciedad, llevándose con ellas lo que no merece la pena, los recuerdos tristes, las ilusiones marchitas, las decepciones, los engaños y mentiras. Todo resbala por mi cuerpo desnudo y desaparece por el desagüe en su viaje al infierno.
Y al final, salgo de la ducha, limpia, renovada, impoluta como una hoja en blanco en la que comenzar a escribir una historia que merezca la pena.

jueves, 17 de enero de 2019

ALTA COSTURA

Soy la costurera de tu vida y voy a bordar las huellas de mis dedos en la sábana de tu piel. Con el hilo del deseo marcaré cada parte de tu cuerpo para confeccionar en él un festón de tus anhelos y hacerte lorzas de placer hasta lograr que tu mente esté al bies.
Hilvanaré mil caricias y las frunciré a tu pecho cada noche con madejas de pasión. Coseré bodoques hechos de besos y haré pespuntes con mi lengua en tu cíclope llorón.
Abriré mi ojal para que tu botón se abroche a él y nuestros cuerpos se unan como las solapas de una única prenda, hasta que se rompa por el uso constante.
Y terminaré haciendo un patrón de mi diseño sensual para elaborar una colección de modelos nocturnos todos los años y vestirte con ellos cada noche.

N'ASTURIANU

Soi la cordurera de la to vida y voi bordar les buelgues de los mios deos na sábana de la to piel. Col filo del deséu voi marcar cada parte del to cuerpu para iguar nél un festón de los tos pruyimientos y faete lorces de placer hasta llograr que la to mente tea al bies.
Voi Afilvanar mil afalagos y voi fruncir al to pechu cada nueche con madexes de pasión. Voi coser bodoques fechos de besos y voi faer pespuntes cola mio llingua nel to cíclope lloramicador.
Voi Abrir el mio ojal por que'l to botón abróchese a él y los nuesos cuerpos xúnanse como les solapes d'una única prenda, hasta que se ruempa pol usu constante.
Y voi terminar faciendo un patrón del mio diseñu sensual para ellaborar una colección de modelos nocherniegos tolos años y vistite con ellos cada nueche.