-
Quieres ver mi joystick? -sigue, chulito, con una sonrisa de
suficiencia en la cara.
-No me
apetece mucho, la verdad...- respondo mientras doy un trago a mi
cerveza.
-Pues
tengo un par de periféricos de primera categoría. -continúa en
plan macho.
Dejo
la cerveza en la barra, le miro con aire de superioridad y le
respondo:
-Mira
chaval, tu tendrás un joystick estupendo con su par de periféricos,
pero solo tienes un puerto USB y yo tengo tres, además dos de ellos
son de entrada y de salida. Tu tienes pantalla plana pero yo en su
lugar tengo un par de webcams de tamaño 95. Mi ratón está
acompañado de alfombrilla natural y además vengo equipada con
impresora matricial y en 3D, que, aunque va lenta y tarda 9 meses en
imprimir el trabajo, lo puede hacer en blanco, negro o a color,
dependiendo del cartucho de tinta que utilice. Así que tu escaso
equipo informático no está suficientemente cualificado para
conectarse con el mío y trabajar en paralelo compartiendo
documentos. Y tu patética forma de querer intimar conmigo me muestra
que tu software es tan limitado como el resto del equipo...
El tipo se va con el joystick entre las piernas...